Tomar una foto diaria es difícil de recordar. Días que están llenos de oportunidades simplemente no lo hago, o días que no hago nada termino tomando a cosas random de mi cuarto. En estas semanas hubo mucho de eso:
32/265 Fui a comer con amigos, me regalaron los Pocky más deliciosos que he probado y me regalé dos comics.
33/365 Febrero en el calendario de hadas que me regaló mi hermano.
34/365 Día de hacer tarea y trabajar.
35/365 Llegaron unas amigas de mi hermano de visita y las llevamos a cenar a uno de mis lugares favoritos. Doña Gabina Escolástica. Esos comics viejos son parte de la decoración.
36/365 Fue un día pesadísimo. No desayuné, mi celular se quedó de batería justo después de tomar esta foto (en clase de textiles). Me perdí en el centro yendo a recoger a las amigas de mi hermano a Tlaquepaque. Comí hasta las 6.
37/365 Cena con mis amigos y novio en un nuevo lugar, delicioso ramen. Los menús se me hicieron preciosos.
38/365 Fue mi
fiesta de cumpleaños
40/365 Pasaron dos días sin tomar fotos, y por poco y pasa un tercero. Pero por suerte le tomé foto a este precioso regalo que me dio una de mis mejores amigas.
41/365 Mi hermano me dio un regalo precioso. Un montón de estrellas que brillan en la oscuridad para mi cuarto. La caja es hermosa también.
42/365 Mi mamá plantó plantas nuevas en mi ventana.
43/365 Parte del desorden de mi escritorio (ya lo ordené, lo prometo).
45/365 San Valentín. Me hice rulitos en el pelo con una nueva técnica (nueva para mí) y me encantó cómo quedó.
46/365 Como hoy sólo estuve en la casa haciendo tarea y trabajando no hay nada interesante. Sólo este regalo que debí dar ayer, y se me olvidó llevarme.
